Imaginemos el espacio de una habitación de hotel estándar, donde cada elemento está cuidadosamente organizado para maximizar la comodidad en un espacio limitado. Ahora, reduzcamos esa imagen aún más, condensando todas las necesidades básicas no para una estancia breve, sino para vivir para siempre en apenas 20 metros cuadrados. Este es el desafío que enfrenta el departamento más pequeño en venta en Lima, donde la optimización del espacio es fundamental. Dentro de este reducido entorno, se despliega un diseño que intenta aprovechar cada centímetro.